viernes, 13 de junio de 2008

Apuntes para una autobiografía: Música y letra

Resulta que estoy leyendo "La misteriosa llama de la reina Loana", de -ahora puedo asegurarlo- mi escritor favorito, Umberto Eco, que trata sobre la reconstrucción de la memoria. El argumento, muy a grandes rasgos, es que un tipo tiene un infarto cerebral y pierde la memoria, y se pasa todo el libro reconstruyendo su memoria en una visita a la casa de su infancia, releyendo sus cuadernos escolares, los libros de su niñez, y toda la bola.

Todavía no llegué ni a la mitad, pero a las primeras veinte páginas yo ya había recordado por qué Umberto Eco es de lo más grande que ha dado la literatura. No vamos a ponernos a discutir si es un simple imitador de Borges (el italiano se reconoce como mero discípulo del ciego), o si es mejor o qué, pero acá van dos ideas mías al respecto:

1) Es como un Borges, pero con onda.
2) Si no le dan el Nobel de Literatura a Umberto Eco en los próximos dos años y siguen rompiendo las pelotas con su corrección política de darle el Nobel de Literatura a un kajastaní, a un turkmenistano, a un sudanés, o a un argentino por eso de "y bueeeeeno... Umberto Eco ya vendió millones de libros... queda bien que se gane el Nobel algún escritor de esos países chotos... Nosotros quedamos como re politically correct, y encima facturamos convirtiendo en best seller a un escritor que no lo leyó ni su madre...", voy y les vuelo la Fundación Nobel usando -paradójicamente- dinamita (quack!).

La cuestión es que, además de los mil placeres que me produjo el leer medio libro, me hizo pensar en mi propia memoria, y una noche, cuando ya estaba en la cama y había apagado la luz, me puse a pensar si yo podría recordar -por ejemplo- cuándo fue la primera vez que sentí un sabor en particular, o haber leído tal libro, o haber experimentado tal sensación.

Es difícil.

Uno puede recordar con cierta facilidad (con ayuda de un calendario, del Outlook, o de lo que sea), cosas que le sucedieron ya de grandecito. Uno puedo recordar con cierta facilidad cuándo debutó sexualmente, o cuándo probó por primera vez un Johnnie Walker Blue Label, pero recordar sensaciones menos concretas ya es más complicado.

Cuándo descubrí la música, por ejemplo, se me hizo difícil. No la música en cuanto a "el arte de combinar los sonidos" (definición de escuela primaria), sino la música en cuanto a "patada en el corazón dada desde el lado de adentro del mismo", que como definición me parece mucho más acertada.

Fue difícil. No pude recordar cuándo descubrí la música. Pero pude recordar exactamente DÓNDE la descubrí. Fue en un auto. Un Ford Falcon, de caja de tres, palanca al volante y luces traseras redondas (los que saben de autos saben a qué me refiero; yo no).

Mi iniciación musical durante mi infancia no era muy prometedora. Mi viejo sólo escuchaba a Elvis Presley. Hoy, a mis 35 años, me encanta Elvis Presley, pero a los dos, tres, cuatro, cinco años, no es que uno pudiera apreciarlo mucho. No entendía una goma lo que las letras decían, y para colmo mi viejo me decía que esa canción que estábamos escuchando se llamaba: "Agitado" ("All Shook Up"), "Osito" ("Teddy Bear"), "Tutti Frutti" (ídem), o "Zapatos de gamuza azul" ("Blue Swede Shoes"). Yo no era un genio, pero a mis tres años era lo suficientemente lúcido como para juzgar que nada que se titulara "Zapatos de gamuza azul" pudiera ser demasiado edificante.

Mi vieja, por otro lado (y muy a escondidas de mi padre, es decir; cuando éste no estaba), me tortur... me inculcaba otro tipo de educación musical: Julio Iglesias.

Ahí teníamos otro problema adicional. En este caso, yo SÍ entendía las letras.

Vamos a hacer una demostración en vivo. Sin red, sin trucos. No voy a buscar la letra en Google. Después de 30 años, voy a intentar reproducir un par de letras de Julio Iglesias que quedaron grabadas en mi memoria. Sepan disculpar los errores:

La maleta en la cama preparando tu viaje
un billete de ida y en el alma coraje
En tu cara de niña se adivina el enfado
Por más que te enojes quiero estar a tu lado

Y pensar que me dejas por un desengaño,
por una aventura que ya he olvidado.
No quieres hablarme, no quieres hablar.
Tu orgullo está herido, te quieres marchar.

Si me dejas no vale. (Si me dejas no valeeeeee)
Si me dejas no vale. (Si me dejas no valeeeeee)
Dentro de una maleta todo nuestro pasado no puedes llevar.
(Creo que se llamaba -obviamente- "Si me dejas no vale").

O esta otra:

Abrázameeeeeee
y no me digas nada, sólo abrázameeeeee
me basta tu mirada para comprendeeeeer
que tú te irás
Abrázameeeeeee
como si fuera ahora la primera veeeeeez
como si me quisieras hoy igual que ayer
abrázameeeeee
Si tú te vaaaaaaas
te olvidarás que un día hace tiempo yaaaaaa
cuando éramos aún niños me empezaste a amar
y yo te di mi vida, si te vas
Si tú te vas
("Abrázame" -seguro-).

Y ahí estaba el problema más grave. Elvis Presley tenía lo que legalmente se llama "el beneficio de la duda". Musicalmente no estaba mal, pero las letras... Bueno, no tenía cómo saber que eran una oda a la pelotudez. Pero en el caso de Julio Iglesias, bueno... Es como que la cosa se ponía más en evidencia, ¿no? A los tres años yo era capaz de escribir algo mejor que eso.

Bueno, la cuestión es que por suerte yo tenía un primo.

Mi primo Fabián.

Mi primo Fabián tenía nueve años más que yo. Si hago un esfuerzo, puedo recordar que yo tendría más o menos doce o trece años. Él tendría veintinuno o veintidós... Mi primo trabajaba en la fábrica de cinta aisladora de su padre (mi tío Cacho), y era el encargado de hacer la distribución de la mercadería, en su Falcon de caja de tres, palanca al volante y luces traseras redondas. Y yo lo acompañaba todos los días que podía.

Creo que en la guantera de ese auto había un solo cassette. Un Grundig de 90 minutos. De un lado estaba grabado el disco "Mediterráneo", de Joan Manuel Serrat. Del otro lado, la 5ta sinfonía de Ludwig van Beethoven, dirigida -seguramente- por Karajan, pero no estoy seguro.

Los recorridos de distribución de la cinta aisladora podían ser largos. Escuché ese cassette muchas veces.

Pocas cosas, lo digo ahora, han tenido tanta influencia en mí como ese cassette Grundig de 90 minutos. Como ese Falcon de caja de tres. Como mi primo Fabián.

Casi diariamente, tuve un curso intensivo de cómo la música puede significar "una patada en el corazón dada desde el lado de adentro" (el primer movimiento de la 5ta sinfonía de van Beethoven es un buen ejemplo para eso), y de cómo una letra puede arrancarte el corazón del pecho, tirarlo al piso, pisotearlo, después levantarlo, limpiarlo, mimarlo, curarlo y volver a ponértelo en el pecho ("Aquellas pequeñas cosas" y "Mediterráneo", dos canciones del disco "Mediterráneo" son un buen ejemplo para eso):

Y uno se cree, que las mató
el tiempo y la ausencia
pero su tren
vendió boleto de ida y vuelta,
Son aquellas pequeñas cosas
que nos dejó tiempo de rosas
en un rincón,
en un papel
o en un cajón.
Como un ladrón,
te acechan detras de la puerta.
Te tienen tan a su merced
como a hojas muertas,
que el viento arrastra allá o aquí,
que te sonríen tristes y
nos hacen que lloremos cuando
nadie nos ve.
("Aquellas pequeñas cosas", Joan Manuel Serrat)

O...

Si un día para mi mal
viene a buscarme la parca,
empujad al mar mi barca
con un levante otoñal
y dejad que el temporal
desguace sus alas blancas.

Y a mí enterradme sin duelo
entre la playa y el cielo...


("Mediterráneo", Joan Manuel Serrat)

Podría decir que crecí escuchando a Elvis Presley y a Julio Iglesias. Pero sería más honesto diciendo que CRECÍ (con mayúsculas) escuchando a van Beethoven y a Serrat.

Mi primo murió a los 27 años en un incendio, junto a mi tío Cacho. Yo me salvé de pedo.

Yo tenía 18 años.

Fue demasiado pronto, la puta madre.

Para él, claro.

Y para mí.

Siento que es absurdo mencionar ahora que posiblemente sea yo el mayor experto en Argentina sobre la obra de Ludwig van Beethoven (hay gente que gana plata dando conferencias sobre el sordo), y que tengo más de mil grabaciones de obras de Beethoven y que puedo reconocer a la orquesta y al director escuchando sólo 20 segundos de la interpretación.

Siento que es aún más absurdo mencionar ahora que no puedo escuchar a Serrat sin ponerme a llorar. Por mi primo, y por tantas cosas otras cosas más en las que el buen tipo de Joan Manuel se ha propuesto ponerle música de fondo a mi tristeza.

Yo sé de lo que hablo, digo mientras escucho a todo volumen y la policía viene por mí, la quinta sinfonía de Ludwig van Beethoven dirigida por el monumental Daniel Barenboim.

Bueno, nada. Fue una reflexión.

CHIVO: TIFOSIS DEL REY




El sábado 14 de junio toca la banda de mi hermano en "Sospechosos", Libertador 1070, Vicente López. Yo voy a ir. Resulta que es una especie de fiesta de disfraces, en la que los que vayan disfrazados de algo serán merecedores de algo especial, no sé... Más detalles en la página oficial del grupo. Igual, ampliaremos mañana...

21 comentarios:

Naty dijo...

De Umberto Eco fue mi "primer libro largo y de grandes", obviamente, "El nombre de la rosa" (y despúes la peli... ñami) cuando yo tenía unos 11 o 12 años -libro robado de la biblioteca paterna-. También fue con el que inauguré las siestas kilométricas en cualquier lado gracias a "la isla del día de antes" -ni hablar del tratado acerca de los espejos-...

Si, el tipo se merece un Nobel o un Oscar o lo que le quieran dar.

Lo invito a hablar de Beethoven con mi señor padre, que se autopromulga el mayor conocedor del Lud de la galaxia... y hace eso de reconocer la orquesta y el director de cualquier cosa que escuche como divertimento (le erró menos de 10 veces en lo que llevo de conocerlo... digo).

Bué, el resto de lo leido no requiere reflexión vacia de mi parte. Sólo ofrecimiento de apoyadita de tetitas, como para levantar el ánimo.

tequesta dijo...

muy loco lo de los recuerdos, muy loco eso de tratar de recordar cual es el primer recuerdo sobre tal o cual tema ... es un ejercicio mental que, a partir de este momento, intentaré hacer ... me gustó la idea

que bueno eso de leer un libro y que te genere algo mas que entretenimiento, no? ... a mi me sucede cada vez, si, CADA VEZ, que leo "el inmortal"

La banda de sonido de mi infancia está formada por Pink Floyd, Bob Dylan, Creedence, Abba, Serrat y algún otro ... sin lugar a dudas, por el hecho de que Serrat cantaba casi todo en castellano, es el mas vivo de los recuerdos ... y al cual me quedo escuchando con cierta nostalgia cada vez que lo encuentro sonando por ahi

tengo recuerdos muy vívidos de cuando era un pendejo así "" de chiquitito, pero no del tipo "en tal momento, me empezó a pasar tal cosa" ... mañana cuando camine por el campo tranquilamente paseando con mi perro y dejando que la cabeza vaya para donde se le cante, intentaré hacer algún ejercicio al respecto

todo el mundo tiene un primo mayor que le abrió alguna puerta de la percepción en la vida? o a mi me parece?

Anónimo dijo...

De Eco: Recién hoy me doy cuenta que lo tenía confundido con Edward De Bono.

De música: Soy experto en Beatles. Incluso puedo diferenciarte los solos de guitarra de George, los de Paul y los de John.

De primos mayores: Martín, me explicó dos o tres cosas fundamentales sobre chicas.

De Tifosis: Si sale una entrada de hasta 10 mangos capaz me doy una vuelta y lo invito una cerveza.

nennella dijo...

Ya googleó a Midnerely Acevedo?

Anónimo dijo...

Te fuiste al carajo. Umberto Eco, Borges, Beethoven, Serrat, Elvis Presley y.... Tifosis del Rey?

La vergüencita que me da es importante.

Hubieses tratado de aclarar que naaaaaaaada tiene que ver con el post, con Serrat, Con Presley, ni tampoco con Julio Iglesias.

Recuerdo la misma vergüenza una vez que publicaron un reviposter de tifosis,junto a Oasis y Coldplay. Una falta de respeto.

Pero bue... valga la aclaración que lo que Lacanna está promocionando está más cerca de las Rickitas que de todo lo hablado en el post.

El hermano de Lacanna (Flash)

Anónimo dijo...

Yo lamentablemente carezco de esa habilidad que tánto citan en este post: la memoria

Desconozco las obreas del señor este... ese tal Eco. Tomando como referencia eso de "es como Borges pero con onda" ya debería tomarlo en cuenta.

En cuanto a los recuerdos... bueno, como ya dije mi memoria no es de las mejores, pero debo reconocer que escuchar durante HORAS los dischos Chronicles 1 y 2 de Creedence no ha hecho otra cosa que quemarme el bocho para bien(de paso me sentaba bien cerquita del bafle).

No se qué me habrá tirado para el lado de la Electrónica, y mucho menos puedo explicar por qué ese tipo de música por lo general suele hacerme más tomas de Judo al corazon que cualquier otro intérprete: simplemente lo siento.
Siempre dije que carezco de "Inteligencia musical", o como diría Tequesta: no puedo tocar ni la pandereta. Pero me doy cuenta perfectamente cuando un instrumento suena bien o mal.
Supongo que, por el año 1995 o por ahi cuando Daft Punk comenzaba a dar sus primeros pasitos lograron alguna sinapsis en mi cerebro que nunca más se deshizo; ya me gané el odio de los musicos de la Old School o todavía no?


Bueno... creo q nada más por hoy...
Les recomiendo alguien que es un capo, que hace música que me encanta, a lo mejor les gusta probar suerte: Robert Miles. Try it

Saludos!

Naty dijo...

En vez de Rickitas, Lacannitas Tifoideas y nos vamos todas con pluma en el ortex para ser reconocidas y envidiadas por el resto... por la chusma!

No es mala idea.

Ana3086 dijo...

Y yo? Mamá me decía que Julio Iglesias era mi padre, y yo creída hasta los 8 añitos.
Lo peor: mis padres siempre vivieron juntos y nunca se separaron..
Slds!

Anónimo dijo...

Cuando tenía 4 años papá ponía un cassette de Rata Blanca. Eso era en Lanús. Cuando nos mudamos acá papá ponía a Led Zeppelin y con mi hermana le decíamos "Poné a los hombres malos". Y estábamos toda la tarde jugando al carnaval con Zeppelin de fondo. Mamá... puuuuf mamá escuchaba a Serrat, Pablo Milanés, Silvio Rodriguez y Montaner (Culpen a ella de mi fanatismo)

Ahora... cualquier escritor que logre moverme la médula es digno de cualquier premio.

(Ah, Naty: mejor somos las del gladiolo en el culo)

Naty dijo...

Uy, dale... un gladiolo es mucho más fino!!

Anónimo dijo...

ah si ... porque si hay una cosa que son las salieris, es finas!!!

Lo... dijo...

Muy buen post!
Que linda sensación esa de "rescatar" recuerdos! Y que difícil también....
Grax!

P.D: mientras leía el post estaba escuchando al REY....Linda coincidencia

Naty dijo...

Finoli finoli, papuso... y andá prendiendo el detetor de ironías, que me lo tenés medio caído.

Anónimo dijo...

A Lacanna parece gustarle los gladiolos en el orto... por eso lo decía. Ay Teques... si ya se sabe que somos unas bestias depiladas.

María dijo...

Serrat es uno de los 3 tipos que me pone a llorar automaticamente con alguna de sus canciones ( en su caso, Juan y José. Y ya me hacia llorar antes de que Ariel, mi otro hermano, se vaya a vivir a la loma del monte Sinaí, que es cerca de la loma del orto, pero con bombas que pasan)
Chicas, lamentablemente no podré ir a ver a Laca junior con el consabido gladiolo orteril, porque es el día del padre y parto hacia el pueblo con regalos raros y recuerdo varios . Porque fue mi viejo el que me formó y deformó musicalmente. Sábados a la noche sagrados de gitarreadas hasta las 6 de la mañana ( y yo era una gurrumina de 5 años que cantaba a todo pulmón En la vereda del sol, de Serú Girán)

Ah, teques... usté NUNCA dio la cara en alguna de las poquisimas reuniones salieris que hubieron por ahí, así que no hable de fineza. Si ni nos conoce...pss

Moe dijo...

El otro día, por mi trabajo, tuve la suerte de estar con Barenboim y alguna que otra detestable presencia que ahora no viene al caso.
No eramos más de 30 personas y sinceramente no me anime a hablarle, pero en un momento cruzamos las miradas e intenté darme cuenta frente a la magnitud de persona que estaba. Creo que ahí mismo reconocí que era imposible, es demasiado grande hasta para darse cuenta.

Plus: Anécdota graciosa, alguien le pidió que opinase algo sobre el conflicto del campo (al parecer para el periodista, Barenboim por poder hablar del conflicto de medio oriente, opinará de cualquier cosa)
a lo que el maestro contestó "Yo no sé de agri(segundo de silencio)cultura, yo sé de cultura".

Tatán dijo...

Che ahora lo que no entiendo es como llegaste a la pasión por Bon Jovi, porque esta bueno tambien pero con Serrat es como que nada que ver :P
En fin, la memoria es algo selectiva hasta que uno llega a una edad que recuerda en random cosas nuevas viejas y mas o menos por igual pero sin saber cuadno fue...
Hay cosas que mejor no acordarse, y cosas que mejor no olvidarse, se complica :D

Naty dijo...

Che... ¿Y alguien va a la fiesta... aparte de Lacanna??

Digo... yo quiero, pero necesito cómplices, carachio.

Naty dijo...

Che, ya vieron esto:

http://www.nuevaliteratura.com.ar/tabrompe.htm

Eh???

YA LO HABIAN VISTO???

Y por qué cuernos no avisaron, caracho hijo e' una gran siete??????

Anónimo dijo...

marcelinho ... hágase una explicación de como se le degenera el oido de serrat a bon jovi ... vamos, dele

Marcos dijo...

Un honor leer cada palabra de éste post, desde Umberto Eco, pasando por Beethoven y Serrat.

Pd: leerte de manera Retroactiva, cuesta, pero ya me acostumbré.

Muchas Gracias.